La Mintzita y sus defensores

El manantial es objeto de constante acoso. Invasiones, incendios provocados y la presencia del “monstruo” papelero enfrentan la resistencia de la Comunidad Ecológica ahí asentada

Raúl López Téllez

No obstante riesgos donde particulares y autoridades estatales y municipales se empecinan en generar condiciones para fraccionar el área protegida, los integrantes de la Comunidad Ecológica “Jardines de La Mintzita” han mantenido por 23 años un proyecto de defensa y restauración del manantial que abastece a mil 200 colonias del sur de la capital estatal.

La resistencia organizada de los pobladores de este asentamiento, campañas y alerta permanentes de cuidado de recursos forestales y, sobre todo, del manto acuífero, amenazado por las descargas contaminantes de la papelera Kimberly Clark.

Pero no es la única amenaza. Los decretos del gobierno estatal para establecer el segundo anillo periférico al igual que el decreto para declarar área protegida al Cerro del Águila, además del Programa Municipal de Desarrollo Urbano impulsado por el Ayuntamiento de Morelia, se convierten en factores latentes contra la flora, la fauna y el mismo manantial.

Así lo señalan los integrantes de la comisión organizadora de la Feria del Agua y Tianguis “La Gotita”, que se efectuará este domingo 13 de octubre en el fraccionamiento Cosmos en esta capital, evento que cumple diez años de realizarse y que los colonos definen como un “dique de contención” en contra de los riesgos oficiales señalados, ya que en el evento se concientiza y se capacita no solo a los de la Comunidad Ecológica, sino a ciudadanos de otros asentamientos de la ciudad e incluso de otros puntos de la entidad.

La Mintzita es un Área Natural Protegida (ANP). De la colonia que lleva el nombre del manantial, un grupo de vecinos se organizaron hace más de 20 años para iniciar un proyecto para su defensa y conservación, al que con el paso de los años se han sumado académicos, y estudiantes, sobre todo de la UNAM Campus Morelia, además de organizaciones solidarias que en conjunto desarrollan faenas, acciones preventivas contra incendios y para su combate, además de enfrentar las amenazas de fraccionadores que merodean el asentamiento.

“El manantial es el segundo más importante de Michoacán”, señalan los colonos. Satisface en un 40 por ciento las necesidades de agua en la capital michoacana; “a más de mil 200 colonias”, apuntala uno de los vecinos.

Alerta permanente

Aluden a la alerta permanente en contra de los incendios provocados o invasiones que presionan para el cambio de uso del suelo. “Si no es por la presión administrativa (en referencia a los proyectos oficiales), es por la invasión de ´paracaidistas´”, señalan sobre los últimos intentos, a principios del año, y que fueron frenados por una denuncia ante la Procuraduría del Medio Ambiente del gobierno estatal, que detuvo los trabajos con la clausura del área.

Además de que es una ANP, señalan que por los humedales en torno al manantial también La Mintzita está declarada como sitio RAMSAR, por lo que la venta de terrenos es ilegal, aunque si hay quienes los ofertan y logran engañar, de ahí los intentos de invasión.

Los incendios, “en tiempos de secas, también están a la orden del día”, siniestros que incluso en el año pasado afectaron arbolado de zapote prieto, especie considerada endémica y en riesgo de extinción. Señalan que en ese esfuerzo, pese a demandar apoyo, no han tenido respuesta suficiente de la Comisión Forestal del gobierno estatal.

Advierten otros riesgos, sobre todo en el polígono de acceso a la zona RAMSAR, con la presencia de personas ajenas al lugar. “Se han quedado por ahí, hay casas, ya tienen granjas; tú vas y no son personas de dialogar, en varias ocasiones ya ha habido situaciones de violencia”, mismas que reconocen no han faltado desde el inicio del proyecto como Comunidad Ecológica y que tuvieron que enfrentar los colonos fundadores.

“Como orilla de la ciudad, no había muchas vías de comunicación; la policía, en vez de ayudar, nos trataban de reprimir. Ellos sí tenían situaciones más graves”, recuerdan.

La Feria del Agua y Tianguis “La Gotita”, surgió “para reforzar la lucha y la defensa del manantial”, coinciden sobre el evento efectuándose desde hace una década, incluso en ocasiones fuera de Morelia, como ocurrió hace dos años en el lago de Camécuaro, en el municipio de Tangancícuaro, donde además participaron representantes de colonias de Zamora. “La Feria nos ha hecho visibles, es el refuerzo”.

Destacan que a partir de la Feria, han logrado el interés de académicos, quienes llegaron a “reforzar” con actividades de mitigación e investigación sobre los recursos de la zona. La actividad anual, indican, “surge como resultado de la capacidad política, de ayudar, que se visibilice que las organizaciones y colonos que participan, no están solos, hay apoyo ante los muchos intentos de acabar con el manantial y que es cada año, desde las personas sintiéndose dueños del manantial, personas que son como indigentes, pero alentados, les dicen ´tú te puedes quedar aquí´, pero son los mismos que se burlan cuando nos ven apagando incendios y ellos solo viendo, sin ayudar”.

De las actividades desarrolladas como Comunidad Ecológica en conjunto con otros actores como la academia, jóvenes u organizaciones sociales, las destacan como “un vínculo que viene desde los inicios y participan para reforzar en situaciones teóricas, monitoreo de aves, por ejemplo; el mapeo del polígono con drones para evaluar la situación real del ANP, los daños por los incendios y el registro de la biodiversidad; el monitoreo del agua, de los reptiles, de la agroecología”, actividades que, dicen, “han servido como escuela, porque se puede aprender”.

Otras actividades son las faenas, “para prevenir incendios, y cuidar el manantial, limpiando el espejo del agua, para que no se vaya empantanado y cuidar la calidad del agua”.

A las amenazas ya citadas, suman el saqueo por parte de piperos, presencia que han tratado de desalentar con el retiro de sus bombas de extracción de agua. “Yo he visto hasta más de 20 pipas formadas”, dice uno de ellos. “Esos piperos, lo que se cuenta, es que van para Villas del Pedregal”, el mega asentamiento aledaño y sobre el que han denunciado los intentos para el desvío de agua.

No dejan de aludir al “monstruo”, como llaman a la empresa papelera Kimberly Clark. “Ésa si se lleva como 700 litros por segundo y regresa otros tantos, pero ya contaminados”.

Los saberes de la comunidad

Con una amplia sonrisa, una de las participantes en la organización de la Feria y Tianguis “La Gotita” dice que “yo le aprendí a la comunidad sus saberes, el hacer, con lo que los demás quieran hacer también y es inevitable que si vas a la Feria no quieras compartir, desde cosas tangibles hasta pensamientos”.

De los participantes y actividades que inician este domingo 13 de octubre a las 09:00 horas, señala: “no me gusta decir que son gratis, porque es el compartir, es de entrega mutua, el dar porque te preocupa la vida, creo que la Feria va por la lucha, la resistencia de una manera alegre, es por la vida, vamos en el mismo barco, si un día se afecta el manantial, no nada más es un cuerpo de agua, son humanos, son especies, de animales, de flora”.

Destacan que la lección del Tianguis, “es replantearnos otra forma de vivir”, dejar de usar plásticos, desechables, reciclar, utilizar, aprovechar. “Mínimo, nos deja pensando eso”.

La décima edición de “La Gotita” se realizará en el fraccionamiento Cosmos, al cual se puede llegar en una combi Rosa.

Poesía, mesas de análisis, danza, música del campo, conferencias, son entre muchas más, las actividades este domingo de Feria del Agua y Tianguis “La Gotita”.

Fotografías: cortesía de la Comunidad Ecológica Jardines de la Mintizta

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