Continúan evidenciándose los casos de acoso contra alumnas de la Universidad Intercultural Indígena sin que las autoridades tomen cartas en el asunto
Redacción
Los casos de acoso contra alumnas de la Universidad Intercultural Indígena de Michoacán proliferan. La Colectiva Feminista de la UIIM ha venido denunciando tal situación, primero en hechos registrados en Kananguio, en Pichátaro y ahora en el campus de Zitácuaro.
Las autoridades universitarias han sido omisas en dar una respuesta a las exigencias formuladas por la comunidad estudiantil y frente a ello, es la denuncia pública una de las vías asumidas para exponer la problemática.
A través de un posicionamiento, la Colectiva Feminista de la UIIM repudia “todo acto de violencia de género y estructural, pasado y actual” al interior de dicha casa de estudios.
En el comunicado señalan que alumnas del plantel en Zitácuaro iniciaron un proceso en contra “del docente Gerardo Esteban Flores Becerril”, la cuales, a raíz de ello han enfrentado violencia y discriminación.
“Nuestra UIIM fue fundada para servir al pueblo de Michoacán y del mundo, donde mujeres y hombres nos formamos en distintas áreas del conocimiento. Es lamentable que al interior de la comunidad universitaria y de la Universidad se den hechos violentos de diversas magnitudes, actos de barbarie donde jóvenes estudiantes han sido víctimas. Historias desafortunadas hay muchas por contar, mientras la impunidad anda a paso suelto por nuestra hermosa casa de estudios”.
Como lo exigieron en marzo pasado, cuando denunciaron casos de acoso en Kananguio, la colectiva exige una vez más que la Universidad haga público los protocolos y la ruta a seguir en torno a la prevención, atención y erradicación de la violencia de género.
Además demandan “una resolución pronta de la situación del proceso del docente Gerardo Esteban Flores becerril que el día lunes fue denunciado por el presunto delito de acoso sexual en contra de algunas alumnas de la institución de Zitácuaro”. También demandan su destitución.
Otra exigencia es para realizar una sesión permanente para la reestructuración del Protocolo de Atención y Sanción para el Acoso y Hostigamiento Sexual Universitario, en donde participe activamente la comunidad universitaria y se invite a la Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres Michoacanas.
Aunado a lo anterior se exige gestionar un seminario de perspectiva de género y prevención de violencia para toda la comunidad docente, además de que se implementen medidas preventivas y reeducativas en materia de derechos humanos e igualdad de género entre toda la población escolar, incluida la plantilla docente y el personal directivo y administrativo.
Activar un Comité de Atención para la denuncia universitaria con perspectiva de violencia de género, es otra de las exigencias para que sea un espacio permanente para dar atención a los casos de violencia.
“Instamos a la institución a proveer mecanismos y espacios que garanticen la seguridad de las y los estudiantes, fomentando espacios de diálogo sobre la prevención y la violencia de género”.
A la comunidad universitaria, particularmente a las alumnas, les proponen fortalecer la autoorganización y co-construir espacios de autocuidado y cuidado colectivo.
“Exhortamos a las y los compañeros alumnos, trabajadores y profesores de la UIIM a romper el pacto patriarcal, y a la comunidad en generar a quebrar el silencio que encubre y protege a los abusadores”.